El instrumental de un radiólogo intervencionista es muy amplio. Desde imágenes de rayos X y procesamiento informático hasta cables, catéteres y endoprótesis, el equipo de radiología intervencionista es vital para la comprensión de diversas afecciones. Además, el uso de este equipo es lo que ayuda a mantener a los especialistas endovasculares a la vanguardia de la tecnología.
Aunque los procedimientos y afecciones de la radiología intervencionista varían en alcance y escala, los instrumentos utilizados para tratarlos siguen siendo en gran medida los mismos. La imagen por ordenador permite a los especialistas endovasculares guiar diversos alambres y agujas para completar una alternativa mínimamente invasiva a la cirugía mayor.
Equipo de radiología intervencionista
Brazo en C
Es el principal instrumento de obtención de imágenes que utilizan los radiólogos intervencionistas para navegar por arterias y venas y realizar tratamientos. Un arco en C es un sistema que utiliza rayos X para producir imágenes en directo. ECCO Medical utiliza el OEC Elite de GE por su alta calidad de imagen y eficacia. Además, la ligereza de la estación de trabajo permite una mejor maniobrabilidad y movilidad en el laboratorio.
Agujas y alambres
Una aguja permite la entrada a través de la piel hasta la arteria o la vena. Enhebrado a través de esta aguja hueca hay un alambre que se muestra mediante rayos X. Una vez dentro de la arteria o vena, el especialista endovascular puede manipular y dirigir el alambre hasta su destino terapéutico. Los alambres pueden tener distintos tipos de revestimientos, longitudes, flexibilidades y formas, según el tratamiento.
Catéteres
Estos tubos flexibles y huecos suelen tener 2 mm o menos de diámetro en el mundo de la radiología intervencionista: ¡son diminutos! A las puntas de estos catéteres se les pueden hacer añadidos y modificaciones para fines específicos: láseres que rompen la placa; globos que abren las arterias obstruidas; implantaciones de endoprótesis; o inyecciones terapéuticas que tratan el agrandamiento de la próstata, los fibromas uterinos o incluso el cáncer. 
Stent
Hechas de metal, las endoprótesis son tubos flexibles de malla diminuta que ayudan a mantener abiertas las arterias para permitir un flujo sanguíneo adecuado. La endoprótesis restablece el flujo de sangre u otros fluidos, dependiendo de la ubicación en el cuerpo.
Bobinas
En algunos casos, el objetivo de un tratamiento es detener el flujo sanguíneo (el propósito opuesto de un stent). Las bobinas pueden servir para este fin. Estas herramientas suelen ser de platino, pero también pueden estar hechas de otros materiales especializados. Cuando se introducen en un vaso sanguíneo, se enrollan sobre sí mismas para crear un tapón dentro del vaso, provocando la formación de un coágulo y el cese del flujo sanguíneo.
Perlas de embolización
La embolización es el acto de cortar el suministro de sangre a un objetivo. Los especialistas endovasculares la utilizan para disminuir el flujo sanguíneo y cortar el suministro de oxígeno a un objetivo terapéutico concreto. Las perlas se utilizan habitualmente para realizar embolizaciones para tratar fibromas uterinos, próstatas agrandadas e incluso cáncer de hígado. En el caso del cáncer, estas perlas pueden especializarse para emitir quimioterapia o radioterapia, lo que puede ayudar a reducir el tamaño de los tumores incluso más que la simple embolización. Las perlas varían de tamaño y material según el tamaño del vaso y el tipo de procedimiento. Entre los elementos habituales que se utilizan para fabricar microesferas están la resina, el vidrio, el alcohol y los polímeros.
